La mayoría de las construcciones utilizan madera en alguna parte de sus estructuras, en los pisos, techos, puertas, entre otros. En los hogares la madera también está presente tanto en los muebles como en otros objetos y accesorios.
Pero, ¿cómo saber si esta madera es certificada y qué importancia tiene? Para entender este tema, en Metrocuadrado.com hablamos con Nicolás Guillermo Pombo Rodríguez, gerente de la división forestal de Smurfit Kappa Cartón de Colombia.
De acuerdo con Pombo, el 43% de la madera que se comercializa en nuestro país es ilegal y proviene en su mayoría de bosques naturales.
“Estos ecosistemas son muy frágiles y cuando son alterados de alguna manera afectan a una gran cantidad de especies causando un desbalance”. La deforestación causa inundaciones, erosión y otros problemas ambientales, afirmó el gerente.
IMPORTANCIA DE USAR MADERA CERTIFICADA
Durante el 2019, en el país se deforestaron 178 mil hectáreas de bosque natural. El 80% del territorio nacional tiene vocación forestal, pero solamente el 52% está cubierto de bosques.
“No podemos seguir contribuyendo con la deforestación del bosque natural y para eso la solución no es dejar de utilizar madera, la solución es utilizar única y exclusivamente madera legal, madera certificada por la Forest Stewardship Council (FSC) que garantiza la sostenibilidad y el buen manejo de las plantaciones y de los bosques naturales”, comentó Pombo.
Entonces, si estás pensando en construir, vas a comprar vivienda o muebles para tu hogar o vas a remodelar y usarás madera y te preocupa el medio ambiente, es importante que preguntes cuál es el origen de la madera que vas a adquirir, si es legal o no y qué especie es.
Ten presente que la madera es un recurso renovable y amigable con el planeta, pero es importante que provenga de plantaciones forestales comerciales certificadas, pues esto asegura que se han generado beneficios sociales, ambientales y económicos.
“Este tipo de plantaciones generan empleo en el campo, protegen el suelo contra la erosión, regulan las corrientes de agua y absorben CO₂”, explicó Pombo.
Adicionalmente, cuando una plantación es certificada por la FSC (la certificación forestal de mayor reconocimiento a nivel mundial) es porque cumple con una serie de normas legales y es un proyecto forestal sostenible, es decir, que es “económicamente viable, socialmente conveniente y ambientalmente amigable”, afirmó el gerente.
ASÍ FUNCIONAN LAS PLANTACIONES FORESTALES COMERCIALES
El país tiene 530 mil hectáreas de plantaciones forestales comerciales. Por ejemplo, Smurfit Kappa cuenta con 42 mil hectáreas, principalmente de Pino y Eucalipto.
“El eucalipto a los 7 años lo cosechamos, el pino a los 18 años. Aprovechamos esa madera y apenas empiezan las lluvias, volvemos a sembrar y los árboles vuelven a crecer. En algunas de las fincas ya hemos repetido este proceso cuadro veces y hemos notado que cada vez la productividad es mayor, porque cada vez tenemos mejor material genético y los suelos se están mejorando”, comentó Pombo.
Una vez la madera es cosechada, se pueden comprar trozas de madera redonda para ser transformada en un aserrío y convertirla en bloques, muebles o demás productos, o también comprar directamente ya los bloques de madera, tablas y teleras en verde (sin secar) y tablas, teleras, listones, cuartones y cercos de madera seca. Todos estos productos certificados por la FSC.
¿CÓMO COMPROBAR EL ORIGEN DE LA MADERA?
En Colombia se requiere un permiso para movilizar la madera o un salvoconducto en caso de que sea madera proveniente del bosque natural. También, las plantaciones forestales se encuentran registradas ante el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA). Por lo tanto, puedes pedirle al vendedor que te enseñe estos documentos para comprobar la legalidad de la madera.
Sin embargo, ya hay productos que cuentan con sello de la FSC, lo que te asegurará que la madera no solo es legal, sino que también es sostenible.
VIVIENDAS EN MADERA, UNA OPCIÓN AMIGABLE CON EL AMBIENTE
Contrario a la mayoría de países, nuestras casas se construyen principalmente con ladrillo y cemento, pero podrían hacerse en madera.
“Construir con madera tiene varias ventajas: es un material sostenible, porque proviene de recursos naturales renovables; es mucho más amigable con el medio ambiente, pues contrario al cemento que produce emisiones de CO₂, la madera absorbe el CO₂ de la atmósfera; y, por último, la construcción se hace mucho más rápido, es más limpia y las casas duran muchísimo tiempo”, explicó Pombo.
Finalmente, el gerente de la división forestal de Smurfit Kappa concluyó diciendo:
“el mejor momento para sembrar un árbol fue hace 20 años, el segundo mejor momento es hoy. Y así podremos garantizar a las presentes y futuras generaciones, fuentes sostenibles de madera para que puedan satisfacer sus necesidades”.